Los manteles de plástico que utilizamos en las mesas de la cocina y el comedor son un material muy práctico para otro tipo de usos. Sobretodo desde que hemos superado la época de los hules floreados y hacen diseños mucho más decorativos.
En estas imágenes podemos ver varios ejemplos. El tamaño que precisan los bolsos no es demasiado grande así que puede ser la forma de aprovechar un hule que, con el tiempo, tiene cortes, manchas o quemaduras. Basta con desechar la parte estropeada y podemos coser un bolso del tamaño que queramos.
Al tratarse de un material duradero, que se limpia facilmente y que aguanta peso, tenemos bolsa de compras para rato. Más ejemplos:
Más usos para el sufrido hule. Recubrimiento de cajas o pufs, como este ejemplo:
También podemos recubrir muebles, y no sólo mesas, con la ayuda de cola o de chinchetas.
He encontrado un buen número de libros en francés sobre cómo crear bolsos, complementos, juguetes, gorros, baberos y hasta zócalos para las paredes con esta tela plastificada. Y aquí os dejo un video de cómo se cose el hule. El truco para que no resbale la aguja es poner encima papel de seda.
me encantan las cajas de lunares!
A mí también me gustan, la única pega es que coser no se encuentra entre mis habilidades. Y ya coser hule… no sé. Pero me gustaría hacer la prueba. Me parecen trabajos muy originales.